Nos han escrito: «Tengo 20 años y actualmente duermo en la sala, careciendo por completo de privacidad o espacio propio, ya que debo esperar a que todos se acuesten para poder usar el espacio, situación que se complica porque mi sobrina permanece despierta hasta tarde y mi madre mantiene su puerta abierta. Me siento estancada porque nos encontramos en una mala situación económica y no se me permite trabajar para buscar una solución. Aunque entiendo las limitaciones de vivienda, esta falta de intimidad es insostenible y el diálogo familiar no funciona bien. Necesito saber qué pasos concretos puedo tomar para conseguir urgentemente mi propio espacio, a pesar de las barreras económicas y la dificultad de comunicarme con mi familia.»

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Hola,

Con 20 años ya eres mayor de edad y eres la única responsable de tus propias decisiones. Nadie te puede prohibir ni trabajar ni buscarte tu propio espacio. En definitiva, nadie te puede prohibir que hagas lo que creas mejor para ti con tu vida.

A riesgo de decirte cosas que quizá ya has intentado, yo haría lo siguiente.

1. Habla con tu madre. Tienes que explicarle como te sientes y que entienda que para ti la situación es insostenible. Seguro que con buena voluntad se puede encontrar una solución: o bien que tu sobrina deje la sala libre antes, o bien que tu y tu sobrina compartáis la habitación, o que tu madre y tu sobrina compartan habitación, o que la sala la ocupes un tiempo tu y otro tiempo tu sobrina, etc.

2. Independientemente de hablar con tu madre, busca por internet en un portal inmobiliario, o bien en alguna oficina en la que alquilen pisos o habitaciones, y mira cuánto te costaría una vivienda. Ten en cuenta que al coste del alquiler deberías de sumarle todos tus gastos (comida, ropa, agua, luz, etc) porque si te marchas de casa seguramente tu familia no te dará ningún dinero. A veces hay ayudas para la gente joven que se quiere emancipar, míralo también.

3. Una vez hayas contado cuánto dinero te hace falta para vivir, mira con qué trabajo conseguirías ganarlo. Hay trabajos que se pagan mejor que otros. Entonces analiza si con tu formación/experiencia podrías optar a uno de estos trabajos. Si no puedes, pues tendrás que aguantarte y formarte para poder optar a un trabajo mejor en el futuro.

Al final para poder emanciparte tienes que estar segura que con lo que ingreses tendrás capacidad de asumir todos tus gastos. Si no pudieras, al final te tendrías que volver con tu familia y te sería complicado.

Es muy importante que cuando tomes decisiones lo hagas teniendo todos los datos y con la cabeza fría, habiendo intentado contemplar todas las posibilidades. No las tomes sin estar tranquila porque será más probable que te equivoques.

Mucha suerte!

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P.D. Si crees que este mensaje te sirve, piensa que lo único que te pedimos es que actúes con los demás de la misma forma que actuamos contigo. Es decir, intentando ayudar sin pedir nada a cambio